Desmontando mitos (III): Las desaladoras NO son una alternativa viable al Trasvase Tajo-Segura

En las últimas semanas hemos leído como las personas que buscan el fin del Trasvase aseguran que el agua procedente de las desaladoras podría sustituir al agua trasvasada. En el post de hoy continuamos desmontando mitos sobre esta infraestructura y os explicamos por qué las desaladoras NO son una alternativa viable al Trasvase Tajo-Segura.

¿Por qué no?

1. La producción de agua desalada depende del consumo de energía eléctrica, por lo que el precio de agua, tanto para el abastecimiento doméstico como agrícola, sería cinco veces mayor que el que se paga por el agua trasvasada. Una cifra que sería inasumible para los ciudadanos y agricultores.
2. Las desaladoras tienen un impacto ambiental importante por la producción de salmueras como residuo del proceso que afecta a la biodiversidad marina.
3. La vida útil de las desaladoras es menor que la de los trasvases (15 frente a más de 50 años), lo que supone un incremento de las inversiones respecto a otro tipo de infraestructuras hidráulicas como el trasvase.
4. El agua de las desaladoras no es apta para muchos de los cultivos, lo que supone un impacto negativo en las exportaciones y la economía de la zona y de toda España.
5. Por último, la inversión es mucho mayor a la del trasvase porque supone la construcción de grandes infraestructuras para la distribución del agua, las del trasvase ya están realizadas y prácticamente amortizadas.

Por todas estas razones verás que el argumento de que el agua de las desaladoras supone una alternativa al agua del trasvase es absurdo. Si a ti también te lo parece, ayúdanos a difundirlo para que continuemos desmontando los mitos sobre el Trasvase Tajo-Segura.