Desmontando mitos (VII): En la cuenca del Segura NO priman los regadíos al abastecimiento humano

En los últimos meses hemos visto como algunos de los usuarios que buscan el fin del Trasvase Tajo-Segura aseguran que en la cuenca del Segura se utiliza el agua principalmente para regadíos en detrimento del consumo humano, al contrario de lo que sucede en otras cuencas. Esta  afirmación es falsa y no tiene argumentos sólidos. A continuación te explicamos por qué.

¿Por qué es falso? 

1. La cuenca del Segura cumple la Ley de Aguas como el resto de cuencas. Para los que no lo sepáis, la Ley de Aguas regula todo lo referente al dominio, uso y aprovechamiento de las aguas en España. Como establece el artículo 60, el orden de preferencia de los usos del agua es el siguiente: primero el abastecimiento de la población y, en segundo lugar, regadíos y usos agrarios.

Sin embargo, en las concesiones prevalece el orden que se establece en el Plan Hidrológico de la cuenca correspondiente, en este caso el de la cuenca del Segura, teniendo en cuenta las exigencias para la protección y conservación del recurso y su entorno.

2. En el Plan Hidrológico de la cuenca del Segura el orden de preferencia de los usos del agua es exactamente el mismo que el de la Ley de Aguas. Como podemos ver en el artículo 14, primero se destina el agua al abastecimiento de la población, por detrás de los usos agrarios, industriales o recreativos.

Por lo tanto, en la cuenca del Segura como en la mayoría de las cuencas en España el abastecimiento de la población prevalece a otros usos como puede ser la agricultura o la industria. Sí tú también estás de acuerdo con nuestros argumentos, ¿nos ayudas a difundirlos?