Encarnación de la Vega, vecina de un pueblo de Almería
¿Antes del Trasvase…? Ya casi ni me acuerdo. Pero era todo muy distinto…
Fíjese que sufríamos muchos cortes de agua… Y no de unas pocas horas, no…
Había veces que duraban días y días.
Me acuerdo de los camiones de agua potable que venían hasta el pueblo. Y que hacíamos cola para llenar garrafas… ¡Qué tiempos! Parece sacado de una película…
Imagínese… Racionar el agua para beber, para cocinar… Y de ducharse ni hablar.. ¡Qué va! ¡No se puede ni imaginar lo que era aquello!