“Sin agua de regadío no hay alimentos”

El agua de regadío es muy importante para el sector de la alimentación, y debemos incidir en la importancia de comunicar su papel y luchar para que esté presente en los lugares de decisión. Y no es que no haya suficiente comunicación sobre el regadío, es que la que hay no se realiza de forma correcta y no llega al conjunto de la sociedad, que no es consciente de que es uno de los pilares fundamentales de la generación de los alimentos que consumimos diariamente. Dar a conocer los valores del regadío es importante para toda la sociedad, pero en especial para la población de las zonas más urbanas, que son los menos conscientes de la repercusión que puede tener si no tuviéramos la suficiente agua de regadío para generar los alimentos que se demandan.

En la UE tampoco se aprecia como se debería el papel del regadío en el sector alimentario, así que es necesario recordarles que si no fuera por el regadío para cubrir las necesidades actuales, se necesitarían 500 millones de hectáreas más. Además cuando no hay agua en el Levante español para regar, se nota en todos los países europeos, ya que el Levante español es la Huerta de Europa.

Así que cuanto antes le demos al regadío la importancia que se merece, antes podremos atender a las previsiones para 2030, que apuntan a que habrá un demanda creciente de agua (40%), de alimentos (27%) y energía (33%).

Para el Levante español el agua del regadío es tan fundamental, que es la base de la agricultura, que directa o indirectamente sustenta la economía de nuestra zona. Y gracias al agua que nos trae el Trasvase Tajo-Segura disponemos de ese regadío que es sinónimo de tener una agricultura moderna y competitiva.